Hoy vamos a hablar de casas jóvenes abiertas al espacio, casas modernas y luminosas. En nuestro país, a diferencia de muchos otros países europeos, se sigue con la cultura de tener una casa en propiedad por encima de los alquileres. Los jóvenes españoles, sean del nivel económico que sean, continúan con su proyecto de comprar una casa como inversión a futuro. Y afincarse en un sitio fijo.
Un español joven, de edad comprendida entre los 30 y los 40 años, con puesto de trabajo fijo, considera un hogar propio como un bien de primera necesidad entre sus prioridades. Se mueve sin parar hasta encontrar el lugar, el precio y las mejores condiciones para lograrlo.
Hemos reformado integralmente desde antiguos bajos comerciales, garajes que dan a la calle, entresuelos inhabilitados hasta ahora. Incluso antiguos talleres que, aun manteniendo su estructura exterior, se han reformado íntegramente para albergar un hogar. Consiguiendo así una casa joven abierta al espacio, moderna y luminosa
Qué nos pide ese público objetivo en estos casos? Pues, dependiendo de las dimensiones, abogan por lo diáfano, por la luz, por espacios abiertos. Unir las zonas de la casa con el menor número de tabiques posibles, puertas correderas en armarios y habitaciones, cocinas abiertas al salón y al comedor y la mayor economía del espacio.
Es muy normal que los techos de estas nuevas viviendas sean o muy altos, tengan a veces una media altura a la que se accede por una escalera o, por el contrario, más bien bajos cuando se trata de entresuelos que dan a la calle. La decoración de estos espacios Loft o “semilofts” es muy variada pero suele predominar en estilo industrial mezclado con el vintage.
Se hacen auténticas maravillas; aprovechando el ladrillo visto original o pintado, techos de aluminio reforzado, suelos de madera para dar calor al espacio, inmensas cristaleras al exterior cuando se trata de antiguos garajes o talleres, etc..
En la mayoría de estas viviendas sean de techos altos o bajos lo más importante es contar con el mayor espacio diáfano y emplear los elementos decorativos para separar las distintas zonas. La decoración en su presupuesto es contenida pero muy buena. Saben combinar IKEA con artículos más exclusivos y en lo referente a la tapicería suelen ser más puristas abusando correctamente de tonos neutros donde predominan los crudos y los grises. El apunte de color se añade en complementos como almohadones, mantas y cortinas cuando las hay.
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